En la actualidad la ecografía es el método de elección en la evaluación de la morfología tiroidea por la gran sensibilidad en la detección de pequeñas lesiones de hasta 2mm, es superior a cualquier otro método de estudio por imágenes, el ultrasonido tiroideo se ha establecido como el “estándar de oro” para la evaluación del volumen glandular y de la presencia de nódulos. Sus ventajas consisten, en que es un método seguro, confiable, de bajo costo, no invasivo y sin radiaciones. Por lo que la ecografía es el examen ideal en la evaluación de la glándula tiroidea y de otras estructuras de partes blandas del cuello.